miércoles, 20 de noviembre de 2013

Ojos grandes



 (A Pamela)



Con ansias te aguardaba papá y mamá,

Sin embargo no sé, si tu o Dios

Retrasaban esta expectativa.

Espera, ahora que digo esperanza

Revivo bien que aceptaban

La voluntad del de arriba; no,

No, solo toleraron esta larga inquietud

Sin ti,

Hasta quizás perdieron la fe en los

Momentos más embarazosos 

Al no tener noticias tuyas.

¿Mil preguntas para Dios surgieron?

 Sin saber que acudiría, algo

Tremendo para la estirpe.



Sí; eres toda una celebración en el hogar,

En el lugar de Dios.



¿Por qué tanta espera?

No sabemos, pero discernimos que eres

La niña de los ojos grandes,

Que escudriña y busca con firmeza

Al creador.

¿De dónde provienes?,

¡¡¡desciendes de la misma eternidad!!!

Tus ojos, tu mirada, tus cabellos, tu indiviso

Todo indica que vienes de arriba.



Con mucha bendición haz llegado a la morada

Bienvenida hermosa niña

De los ojos grandes.

Nadie como tu aspiraban tu llegada

Tu presencia cambia por completo

La vida de papá y mamá;

Mudas por completo las vidas.



Con beneplácito comprenden

Que Dios te envió, para dicha

No por casualidad.

El Todopoderoso propuesto tenía su prosperidad,

Por los cuantiosos cambios

Que aprecian a tu llegada;

Advenimiento que bendijo a todo y en todo.

Así de hermoso es tu arribo familiar

Gracias Señor por lo que intimamos

Y cumples a cabalidad tu promesa,

Aportando a nuestro cuidado la niña

De los ojos grandes.





Chendo ’13.




sábado, 16 de noviembre de 2013

Bebe en el vientre



NIÑA

Árbol del deseo, globos rosas, blancos, recuerdos
Y la muchedumbre de familia, amigos esperando
Tu llegada.
Las anfitrionas anuncian el motivo del evento.

Eres  niña agraciada, desde tu nombre
Hasta los juegos preparados con antelación
Para esta especial ocasión.

Flor de María te llaman tus papas,
Honrar a las abuelas decidieron  esta vez
Tu nombre alude por si solo;
Belleza, amistad y amor………….

Mamá y papá impacientes están
Por tenerte en brazos.
Abrazos de ternura
Por siempre perduraran

El Dios de amor te predispuso
Desde el infinito.
En la pareja con polen fecunda
Que miel destilan a su paso.

Por eso el Todopoderoso
Se agracio con la familia
Bendiciendo con la llegada
De Flor de María.


Chendo ’13

Supermamá

Mamá de diez

Mami me parece que fue unos días atrás.
Pero cierto ya pasaron soles y lunas
Cuando arrullabas en tus senos
A mis queridos y amados hermanos.

Vi cómo te esforzaste con tesón
Dejando nada para ti, para dar lo mejor con pasión
Con ese amor que tienes de madre de diez,
Evaluación no es.

Cuidaste  de cada uno como preciado tesoro
Y nos diste por heredad tu sabiduría,
Sabiduría que guardo como oro
Que cada uno de tus consejos necesitaría.

Ahora representas a la madre más linda
Del terruño donde vives y clamas
A Dios, cual a la redonda colinda
Con Jesús el mismo que glorificas.

Al Creador gracias, por el exagerado amor
Que brota de tu ser,  para  dar con fervor,
Ternura desbordada para tus hijos
Que nunca degrado para cada uno de nos.

Ahora que veo tu rostro aventajado
 ¡Madre querida!;  el Dios Trino te ha dado
¡Gracia y don preciado!
Para corregir nuestro camino andado.

Tus conocimientos y tus oraciones
Nos ha dado aportaciones
Para comprender tu creencia
Con ilustración y conciencia.

Gracias Todopoderoso por tenernos apartados
Desde el vientre, de la mujer virtuosa;
Que con ternura somos sujetados
A la madre amorosa.

Palabras faltan para ensalzar
¡Tu nombre!, ¡nombre de mujer valiente!
Que sobresale de cualquier ente
Para dar, sin nada restringir.

La Eternidad te siga enalteciendo mamá
Esperamos tenerte muchas temporadas
Como Juanita  que ama
A Jehová  en tus pasajes.




Chendo
Mayo/13





En memoria



Superviviente
(al padre terrenal como ejemplo de vida).
Quizás para la gente tan solo fuiste otro seudónimo común.
Revisando la historia me encuentro que tu nombre pertenece a un legado de Reyes y corrientes arquitectónicos en el mundo.
Sé que eso, nada fue importante para ti.

Emergiendo de lo común y corriente del mundo ordinario, mundo del cual con sabiduría hiciste a un lado, para tomar por legado la sabia palabra del Dios Altísimo, que te apropiaste de ese conocimiento, de esa revelación que no asentiste por alto.
Contrario a eso tomaste con humildad; sabiendo, denotando que ese era el camino a seguir.
Razón tenían los siervos que te visitaron en tu lecho, en ese cuerpo ahora inanimado, mencionaban que fuiste ejemplo a seguir el cual construiste ¡la fe sobre Roca solida!, fe que no se quebrantó, ni se doblego en tiempos de angustia, ni aun ese día fatídico para mí y otros no pocos.
Para ti, ese no fue un día funesto sino todo lo contrario, fuiste de tantos el elegido para estar cerca, cerquita de Dios, para seguir glorificando la soberanía del insuperable que un día conociste con acierto.
Mi entendimiento aun no acepta tu partida repentina, siento que faltaron cosas que decirte, que decirme; creo  y sé también que no puedo contravenir la voluntad del eterno. Por eso construido fue tu destino, destino trazado por el mismo dedo de Dios, que florecerías como su Siervo preferido, al darte el honor de difundir su nombre por donde anduviste, por donde fue necesario, sin amilanar ni un instante, a todos y para todos hubo palabra de Dios, y se ahora que anduviste con orgullo junto al Señor de Señores.
Ahora que haz partido al encuentro con tu Salvador nos dejas una tarea, una gran enseñanza, en ser tú el ejemplo familiar, de las generaciones venideras.
Los que te intimamos usaste la verdad y solo la verdad para crear la certeza de muchos, muchos hemos flaqueado en nuestro transitar con Dios, pero tú, ni un instante dudaste ni  por asomo de la existencia del Dios no conocido.
Tomaste con valentía la espada del saber, te cubriste con la coraza de justicia, hiciste tuya el yelmo de la salvación, arrebataste con gran osadía las bendiciones que te correspondían por antaño las promesas de Dios en tu vida.
No cabe ni la menor duda que Dios te bendijo con abundante Gracia, y ese don maravilloso que el Padre te regalo, distes a diestra y siniestra sin escatimar nada. Por eso vi la paz de tu sonrisa que esbozaste en tu tálamo de muerte, muerte que junto a Cristo es ganancia.
Recapitulaba y me preguntaba ¿Cómo hiciste para no flaquear en todo momento?  ¡He aquí la respuesta! Tu fe verdadera en lo que creíste hizo posible al hombre ejemplo. Si eres un ejemplo para tus hijos, tus hijas, tus yernos, tus nueras, tus nietos y bisnietos, toda una generación que te dice ¡Hasta pronto padre!
Tú ya pasaste a ser parte de los ángeles que adoran a Dios en su propio trono. Espero verte ahí, me falta culminar la carrera que un día enseñaste a mi vida.

Chendo
Abril ‘13


P.D. Gracias padre por tus oraciones y tus peticiones que siempre clamaste para mi bien, te agradezco de corazón con mucho, mucho amor. 
¡¡¡¡¡¡¡TE EXTRAÑO!!!!!!!
Manuel
1940-2013